domingo, septiembre 04, 2005

El tiempo es relativo

Una noche, mi amigo Alberto me preguntó si alguna vez había experimentado Aceleración Cero. Extrañado busqué por los recovecos de mi mente, para alcanzar algún registro que me indicara si es que yo, en algún momento de mi existencia, experimenté tal fenómeno. Sin embargo, mi memoria y mis recuerdos no lograron obtener resultados positivos, convenciéndome de mi carencia experimental.
Quedándose callado un momento, mi amigo, sonrío y comentó que solamente en el espacio se puede experimentar aceleración cero y en ciertos casos el hombre logra generarla, forzando un desplazamiento contrario al del planeta. ¡Sí! Ese que se logra cuando un avión de la Nasa desciende desde máxima altura, precipitadamente, con su nariz apuntando hacia el espacio de oeste a este. En su interior, comúnmente, se ven hombres y mujeres rebotando y flotando.
Bueno, ustedes me dirán que esa técnica es usada por los expertos de la Nasa para provocar gravedad cero y de esa forma entrenar a los futuros astronautas. A lo que tengo que decirles que así es. No obstante, en esas circunstancias también se presenta la Aceleración Cero, pero es desestimada por la relevancia de provocar Gravedad Cero.
El hecho principal es que el señor Einstein pensó - en sus reiterados momentos fugaces - que el hombre viviendo en la tierra experimenta una aceleración de alta magnitud y es incapaz de percibir la famosa Aceleración Cero, ya que sin ella la fuerza centrípeta, que nos mantiene pegados a la tierra, desaparecería y saldríamos disparados hacia el entorno espacial donde si hay Aceleración Cero.
La reflexión va un poco más allá dado el hecho que, la aceleración que llevamos permite que el planeta tenga un giro uniforme y una traslación constante, dando autorización física para que ocurran fenómenos tales como la atmósfera, el clima y la vida.
Pero si profundizamos aún más, llegaremos a una de las bases con las que Albert se consagró como un buen pensador. Este caballero pensó que: Si la Tierra tiene un giro constante, el hombre experimenta una aceleración física que lo desgasta paulatinamente, siendo inexorable el término de nuestras funciones físicas por el desgaste. Además, que la duración de los días y de las noches es relativa, dependiendo de donde nos encontremos en la tierra. Y, por último, dado el hecho que no experimentamos aceleración cero, siendo perpetuo nuestro desgaste aquí en la tierra; eones, siglos, décadas, años, meses, horas, minutos, segundos, EL TIEMPO como nosotros lo entendemos, ES RELATIVO fuera del planeta.


Hache Kija Ol.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Your website has a useful information for beginners like me.
»

 
Creative Commons License
Esta obra está bajo una licencia de Creative Commons.